El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha anunciado durante su visita este miércoles al nuevo Palau de Justicia de la Vila Joiosa la adjudicación de las obras del Hospital Marina Baixa que supondrán una inversión de 60 millones de euros para mejorar la atención sanitaria de la comarca. El president ha mostrado la voluntad de la Generalitat de «participar en la reconstrucción, tras la pandemia, de un sistema de salud potente» que, según ha señalado, constituye «uno de los pilares fundamentales del estado del bienestar, junto con la educación y la justicia».Asimismo, Ximo Puig ha asegurado que las obras de ampliación del hospital, que comenzarán en marzo, atienden una reivindicación de la comarca y tienen como objetivo prioritario «generar los mejores servicios públicos de calidad para atender a la ciudadanía de la Comunitat Valenciana». Tal y como ha detallado, la obra ha sido adjudicada a la Unión Temporal de Empresas formada por FCC Construcción y el grupo valenciano Bertolín, y su plazo de ejecución previsto es de 30 meses.
El proyecto contempla duplicar el espacio asistencial del hospital que pasará de 33.000 a 63.000 metros cuadrados, con la construcción de un nuevo edificio conectado con el actual hospital, sobre una parcela de 21.000 metros cuadrados.
En el nuevo edificio se va a ubicar gran parte de los servicios tecno-asistenciales, así como las nuevas urgencias. Además, va a contar con una Unidad de Corta Estancia, una nueva zona de diagnóstico por imagen, que dispondrá de dos salas de TAC, resonancia magnética, radiología convencional y mamógrafo.
12 quirófanos y una nueva UCI
Por otro lado, se instalará un nuevo bloque quirúrgico con 12 quirófanos, un área obstétrica nueva, una nueva UCI y una nueva central de esterilización. Desde el Ayuntamiento de la Vila Joiosa, el alcalde de la localidad, Andreu Verdú, ha declarado estar «muy contento» ante el anuncio de esta adjudicación. «Es una buenísima noticia que demuestra, una vez más, el interés y compromiso del Consell y el Gobierno de la Vila Joiosa para resolver una de las mayores reivindicaciones históricas en materia sanitaria de la Marina Baixa”, finaliza Verdú.