– La Conselleria ha empezado la redacción con sesiones para impulsar el diálogo y la colaboración entre los municipios y la administración
– La secretaria autonómica de Política Territorial ha participado en sendas sesiones en Dénia y Altea, con representantes municipales de estas comarcas
La Conselleria de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad ha iniciado con los ayuntamientos de la Marina Alta y la Marina Baixa, las sesiones para la definición de oportunidades del ámbito del Plan de Acción Territorial (PAT) de las comarcas centrales.
De esta forma, la Conselleria ha empezado la redacción del PAT de las Comarcas Centrales con sesiones encaminadas a impulsar el diálogo y la colaboración entre los municipios que lo integran y la administración autonómica.
Este proceso participativo continuará en el resto de comarcas para derivar, en el plazo de seis meses, en el documento que tendrá que ser sometido a exposición pública para ser elevado a definitivo
Así, la secretaria autonómica de Política Territorial, Imma Orozco, ha participado en sendas sesiones en Dénia y Altea, que ha contado con la asistencia de los alcaldes de estas dos localidades, Vicent Grimalt y Jaume Llinares, respectivamente, y de representantes de las corporaciones municipales de la comarca, así como del presidente del Consorcio de las Comarcas Centrales, Roberto Granero.
Para la secretaria autonómica de Política Territorial, «la colaboración del Consorcio es muestra de las sinergias que podemos establecer en esta área de tradición mancomunada». En este sentido, ha valorado que el Consorcio «actuase como impulsor del PATCC y que trabajase por la plena integración de las Marines en esta área que histórica y territorialmente ya es reconocida». En ese sentido, ha añadido, «hay que hacer mucha pedagogía de las bondades de esta delimitación, tanto escala territorial como económica y de gobernanza».
4.500 km² y 850.000 habitantes
El PAT de las comarcas centrales, que fue adjudicado recientemente, abarca un total de 180 municipios de las comarcas de la Marina Alta y Baixa, La Canal de Navarrés, La Safor, l’Alcoià, el Comtat, La Costera y la Vall d’Albaida, con una extensión de 4.500 km² y 850.000 habitantes.
Los ejes del Plan son la continuidad y cohesión de la infraestructura verde, la gestión razonable de los usos del suelo, la movilidad entre las diferentes zonas y la definición de las actividades económicas que representan una mayor idoneidad en cada una de ellas con el fin de elaborar una marca con peso propio que sea alternativa a las grandes áreas metropolitanas y que profundice en el equilibrio territorial.
En esta sesión, los participantes han trasladado tanto sus inquietudes como aquellas cuestiones que consideraron oportunas para mejorar el PAT, por su parte, Imma Orozco ha insistido en que la necesidad que este, como el resto, sea un plan participado y «codedidido».
«La Generalitat actúa con una visión global e integral en el suelo no urbanizable, que es donde se enmarcan sus competencias, pero la atención a las singularidades de cada municipio y los consensos son claves para asegurar la utilidad del Plan», ha señalado.
Asimismo, la secretaria autonómica ha indicado que «en estas sesiones se ha puesto de manifiesto la necesidad que este territorio tome un impulso en ese sentido, en un momento en que hay que aprovechar que estas comarcas han demostrado ser claves a la hora de dar respuesta a la emergencia sanitaria».
Además, ha subrayado que «la proximidad es un valor añadido y las comarcas centrales ya cuentan con una buena base industrial dispuesta a adaptarse a los retos de presente y futuro en materia de cambio climático y lucha contra la pandemia y otras posibles situaciones que podamos vivir, y muestran características idóneas para la implantación de nuevas industrias».
Como complemento a esa vocación, «en las Marinas se ha reconocido la importancia de la diversificación económica, especialmente, de un sector como el turístico de arraigada implantación, que tiene que aprovechar el PAT para facilitar su transformación hacia un modelo sostenible y resiliente, que se adapte a los tiempos, reivindique su entorno y que sea justo y de calidad», ha concluido Imma Orozco.