COMPROMIS PER CALLOSA D’EN SARRIÀ ha emitido un comunicado en el que explican que:
La COMISIÓN DE GARANTÍAS de Más-Compromís, ha dictado una resolución que supone la expulsión del partido de 7 militantes de Callosa d’en Sarrià, después de los informes que se redactaron sobre actuaciones tipificadas en los Estatutos de Más, como graves o muy graves cometidos por parte de este grupo de militantes.
A los militantes a quienes se les imputan estás acciones son Joana Montiel, César Ferrando, Josep Maria Orts, Vicent Llobell, Jordi Sanchis –estos dos últimos con décadas de militancia en la formación –, Mónica Carrión y Lumi Puigcerver.

Un amplio porcentaje de los expulsados estaban en la lista de las pasadas municipales

La Comisión de Garantías es el órgano responsable de «garantizar el respecto a la democracia interna del partido y los derechos de las personas militantes, así como de interpretar los Estatutos y la normativa interna de Más-Compromís».
Además, una de estas actuaciones ha sido transferida a la Comisión Revisora de Cuentas del partido porque consideran que hace falta una actuación de auditoría añadida a la resolución del expediente. El resultado de esta resolución viene dado después de un larguísimo proceso altamente garantista, de 8 meses, donde la Comisión de Garantías ha estudiado los diferentes informes enviados y TODAS LAS ALEGACIONES presentadas por estos 7 militantes.

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Entre las acusaciones que han motivado la expulsión se encuentra la difusión de mentiras, como por ejemplo un supuesto pacto de gobierno, sin ningún apoyo documental, la difamación intencionada de las dos regidoras, el uso de humillación pública y los insultos.
Según el comunicado «Todas estas actuaciones quedan muy lejos del que sería la libertad de expresión, con la única motivación de hacer daño intencionadamente a las regidoras electas y a la organización».

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Por un otra parte, quedan varías denuncias que la Comisión de Garantías tiene que resolver por lo que no es puede afirmar en ningún momento, que ha habido irregularidades en la elección de la actual Ejecutiva Local, ni acusar impunemente al Secretario Comarcal, pareciendo más una «rabieta de mal perdedor».