Miles de personas visitaron el XVI Mercado Medieval de La Nucía durante el pasado fin de semana, del 8 al 10 de julio, que fue un gran éxito. Esta actividad se enmarcaba dentro de los actos programados para conmemorar el 317 aniversario de la fundación de La Nucía (1705-2022). Malabares, danzas, música y demostraciones en vivo de artesanía cautivaron a los miles de visitantes del Mercado Medieval.
El Mercado Medieval fue una iniciativa del Ayuntamiento de La Nucía para celebrar el 317 aniversario de la población (1705-2022) y está organizado por AMATA (Asociación para la Mejora de la Artesanía Tradicional y Actual), que garantiza que todos los puestos fueran exclusivamente Artesanía de Autor.

Vuelta tras dos años
Tras dos años de parón en 2022 La Nucía recuperó su tradicional Mercado Medieval, que se desarrolló con total normalidad y pudieron desarrollarse todas las actividades y animaciones programadas.

Los visitantes vieron en directo a los artesanos realizar sus piezas en sus puestos de auténtica artesanía del Mercado Medieval de La Nucía.

Visitantes de toda la provincia de Alicante y turistas de diferentes nacionalidades pasearon por las calles del casco antiguo de La Nucía en un intenso fin de semana, donde los más pequeños disfrutaron de las múltiples actividades.
Esta feria de artesanía de autor estuvo ubicada durante tres días, en pleno casco antiguo junto al Ayuntamiento: la plaça Sant Antoni, carrer Els Xorros, plaça Santa Teresa, carrer Major, carrer Enmig, plaça Sant Josep y plaça Major.

Auténtica artesanía
El Mercado Medieval de La Nucía estuvo compuesto por puestos de auténtica artesanía de autor con demostraciones en directo, donde los artesanos realizaron piezas por encargo en el momento y de cara al público. Hubo cerámica, zapatos, bolsos y cinturones, vidrio, joyería y bisutería de diseño, madera de torno y tallada, jabones artesanales y mucho más. En el rincón gastronómico hubo puestos de alimentación: quesos y embutidos artesanales, frutos secos, pan y dulces, así como una taberna medieval, una pulpería, una crepería y una jaima con comida árabe.

Animación nocturna y Atracciones infantiles
Además de la decoración y los puestos medievales y trovadores, zancudos, caballeros, bailarinas, músicos y otros personajes se mezclaron con el público. Se realizaron espectáculos (esgrima, danza, malabaristas, etc) y cerró cada noche un gran espectáculo con fuego en la plaça Major. Para los niños hubo una ludoteca con juegos medievales, talleres de alfarería y un divertido carrusel.
Para completar el ambiente medieval hubo un pequeño campamento en la plaça Sant Josep donde hubo talleres de combate medieval y talleres de tiro con arco.